Nacionalsocialismo y antigarantismo penal (1933-1945)

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La concepción nacionalsocialista del Derecho se caracteriza por su irracionalidad, organicismo y racismo, oponiéndose a la Ilustración, el liberalismo político y el positivismo jurídico. Se examina la dualidad entre la Policía y la Administración de Justicia, donde esta última, cada vez más autoritaria, se diluía en la acción del Estado Policía, sin sujeción a normas. Este fenómeno culminó en el genocidio de los judíos y otros grupos, así como en el asesinato de aquellos considerados portadores de vidas sin valor. Se estudia la legislación penal nacionalsocialista, su carácter racial y su desprecio por principios como legalidad, lesividad, culpabilidad y proporcionalidad, que se manifestaron de manera extrema en el Derecho Penal de guerra. Además, se analiza la doctrina penal nacionalsocialista, con un enfoque en el papel de Hans Welzel. El Derecho Procesal Penal nazi se caracteriza por su autoritarismo y racismo, rechazando la presunción de inocencia. Se concluye que las categorías de Derecho Penal del enemigo y Derecho Penal del ciudadano no son aplicables al nacionalsocialismo, ya que todo el Derecho de la época era un Derecho Penal contra los enemigos, siendo más pertinente la dicotomía amigo-enemigo, que conducía a la impunidad de los partidarios del régimen.